martes, 6 de agosto de 2013

TRASTOS PARA CREAR SORDERA. MI EQUIPO DE TRONÍO

Nunca he sido un músico que se preocupara demasiado de los aspectos técnicos del equipo que utilizo. Os podría decir que para mí siempre ha sido más importante el "qué tocar" que el "con qué tocarlo".
Realmente nunca he entendido muy bien a esos músicos que se pasan la vida cambiando y cambiando de equipo. En realidad me da más la sensación de que es puro consumismo lo que los mueve, que se dejan llevar más por tendencias que por su propio criterio y su intuición. Pero de ese tema ya hablaremos más adelante.
No obstante, uno empieza trasteando con un instrumento cualquiera conectado a un altavoz cualquiera, pero con el tiempo tu oído se va volviendo más quisquilloso y ya no vale un "petardeo cualquiera".

Vas probando cosas, en mi caso poco a poco. Y vas encontrando lo que realmente te pide el cuerpo para hacer tu música. Obviamente depende de géneros, estilos, etc. Y sobre todo, de gustos.
 Lo que he aprendido en estos años es que algo esencial para tocar, componer y grabar, es fiarte de tu propio oído y de tu intuición. Si te gusta, adelante.

Yo, como fan del metal y el rock de los noventa sobre todo, tengo una debilidad. La distorsión, o, en este caso, el overdrive. Siempre me ha fascinado el sonido de los bajos de Justin Chancellor de TOOL. Un sonido brillante, pero con mucho cuerpo. Un sonido brillante y a la vez roto. Me encanta!

 Pues más o menos hacia ese sonido ha ido mi configuración siempre: Utilizo un cabezal SWR WORKINGMANS 2004, y en ocasiones un Ampeg Portaflex 500 de mi amigo Gaspar, con una pantalla Ampeg SVT-410HLF. El Portaflex de Ampeg, la verdad es que es un trallazo de amplificador por que compensa muy bien con la EQ medios y graves y el bajo suena definido pero conservando todo el cuerpo y la presión que dan los graves en la afinación que utilizamos uVe (C dropped).

También utilizo una pedalera compuesta de pedales analógicos:

Un ecualizador gráfico BOSS GE-7


Un Bass Overdrive BOSS ODB-3
 

Un pedal de Chorus CEB-3


 Y un afinador Fender PT 100.


He utilizado varios bajos a lo largo de estos años, la mayoria de Ibanez, pero el que para mí es la joya de la corona, el que lleva años conmigo y lo seguirá estando es mi MUSIC MAN S.U.B Ernie Ball. Por que es el bajo que suena como a mí me gusta. Ese sonido medioso y brillante que con una ecualización grave y algo de distorsión es una apisonadora.



 En breve comenzamos los ensayos con uVe, y volveremos a grabar demos para componer en el local de ensayo. Espero que os haya entretenido un poco esta mierda. Seguiré contando secretos de un grupo de rock en próximas entradas. Os dejo con una pequeña muestra (con calidad de audio no muy allá) de todo lo que os he enseñado.
Gracias por leer. Bye!

2 comentarios: